NUESTRA PRESENTACIÓN…¡UNA FIESTA!

    Y es que, aunque hubo cosas que no salieron como queríamos, al final todo fue una bonita fiesta en la que todos pudimos disfrutar. Las familias, desde las gradas, y las jugadoras y técnicos en la pista, del baloncesto, de la amistad, de las compañeras, de la música, de la alegría, del buen humor, y de ilusión, mucha ilusión.

    Para empezar, tuvimos la satisfacción de que quisiera estar con nosotros el Presidente de la F.B.C.V., Salvador Fabregat, que con sus palabras iniciales nos animó a seguir viviendo y desarrollando el baloncesto. Después también se nos unió el Delegado de Alicante, Juan Miguel Sila. ¡Gracias a los dos por acompañarnos!

    Y después de las palabras iniciales de Miguel Ángel, nuestro Presidente y entrenador, y de Salvador Fabregat, pudimos ver un emotivo montaje de imágenes y música con la canción “TORNAREM”. Y sí, volveremos, seguro. A continuación pudimos conocer a todas las jugadoras de todos los equipos, una a una y por su nombre. Fue un auténtico placer ir nombrándolas y escuchar los aplausos que las acompañaban. ¡Qué pena por las que no pudieron estar ese día con todas nosotras!

    Y después, la exhibición de toda la ESCUELA DE BALONCESTO –EBCM– que nos deleitó con sus habilidades y su contagiosa alegría, cerrando su actuación con un maravilloso baile que, de verdad, arrancó los ¡bravos! de las gradas. Casi parecía que en el público estuvieran sus padres…

    Pero había que seguir, y Cristina, del equipo Junior, nos leyó una carta dirigida a la afición, realmente emocionante, para, a continuación, seguir con la creación interpretativa de las Senior, que nos hicieron sonreír y reír. ¡Gracias Seniors! Y después, la exhibición de todos los equipos federados…que fue un poco “caótica”. La intención era buena, pero los resultados… Menos mal que al final, con la última música, “It’s my life” pudimos expresarnos a tope y acabamos todas las jugadoras juntas bailando y afirmando sobre la pista: ¡ES NUESTRO CLUB!

    Y ya por último, para descansar de todas las emociones y las energías gastadas, vino el momento de compartir mesa disfrutando de la compañía y de un montón de cosas riquísimas aportadas entre todas la familias y que, junto con los numerosos premios que se consiguieron en la rifa, nos hizo irnos a casa satisfechos, contentos, ilusionados…y un poco más unidos a este Proyecto que se llama CABO MAR. Y ahora hay que seguir pues… ¡la temporada continúa!