LAS CADETES NO AGUANTAN HASTA EL FINAL
Llevaban un buen partido ante el Lucentum, y el juego era bastante interesante por nuestra parte, dominando incluso en el marcador. Pero nos faltó consistencia para mantener ese dominio y control, y cuando la situación exigió aumentar el nivel de nuestra respuesta, no fuimos capaces. Una pena, pero al menos en este partido sí que hemos salido de la pésima imagen que se dio la jornada pasada. Por eso, ¡BIEN!
La crónica de Pablo: “Tras una pequeña racha dura, parece que empezamos a levantar cabeza, no de forma absoluta pero sí como un comienzo de vuelta a la dinámica
positiva y a la ilusión de lo que este equipo puede conseguir unido. Comenzamos muy bien, impusimos el ritmo del partido y ello nos permitía recuperar balón y correr y, cuando no podíamos correr, se movió muy bien y se encontraron grandes acciones, tanto colectivas como individuales, lo que nos permitió coger en 15 minutos una renta de 11 puntos (16-27).
Pero una pájara el el cuarto periodo hizo que encajáramos un parcial de 8-0, que puso el marcador (24-27), dando alas a las locales y llevándonos tocadas al vestuario. Nuestra única opción era seguir luchando como los primeros 15′ minutos para merecer llevarnos el partido, pero las locales creyeron más y nosotras no mantuvimos esa lucha y esa concentración en el juego, cediendo mucho en ritmo, renunciando a correr, permitiendo demasiado en defensa y sin mover el balón como al principio, lo que dio la victoria al rival. Estamos retomando el camino correcto, sigamos creyendo siempre y, con trabajo diario, llegarán los resultados en una segunda fase apasionante que nos espera.”
Parciales: 4-8; 4-8; 8-11, 8-0; 6-5; 7-2; 4-2; 6-5.